El Ayurveda aborda la nutrición desde otro paradigma que la visión occidental. En Ayurveda no se le da tanta importancia a los macro y micronutrientes y las calorías, no se cuentan números ni gramos de carbohidratos, proteínas, grasas, sino que se tiene una visión más orgánica, natural e integral de la alimentación.

En el Ayurveda toman relevancia las cualidades de los alimentos, los sabores, su potencia energética, lo cual hace que la manera de nutrirnos se vuelva más intuitiva, como fue en sus orígenes, donde el oler, observar y tocar un alimento nos dará mucha información sobre cómo nos sentará al ingerirlo. 

Por otra parte, el Ayurveda no tiene una dieta mágica para todo el mundo, algo que aparezca como la última dieta de moda que a todos les hace bajar de peso, a todos les sienta bien y a todos los hace estar con más energía. No, el Ayurveda considera que cada individuo es único y que el conocimiento de sus doshas, desequilibrios y cualidades será una guía para entender qué alimentos serán los más adecuados para cada persona. 

Por lo tanto, el Ayurveda, te recomendará ciertas pautas a seguir sobre qué alimentos serán mejores o peores que otros, basándose en tu constitución, tu edad, la estación del año, la forma de prepararlos y combinarlos, la condición especial de tu vida actual, y varios factores, haciendo de la nutrición un camino de auto descubrimiento y constante atención.

No es una dieta circunstancial, es enseñarte a seleccionar los alimentos adecuados según tu constitución y es para toda la vida.

Y hay que sumarle una parte fundamental y obligatoria que son los entrenamientos coordinados y planificados de algunas variantes de Yoga, Calistenia, Artes Marciales, que se escogerán según la condición de cada persona para lograr el objetivo principal que es la salud equilibrada